Los participantes en un foro celebrado en Wuhan, capital de la provincia central china de Hubei, han coincidido en señalar que el impacto del proyecto ha sido "notablemente adverso" en el entorno de la presa, informa la agencia oficial china Xinhua. Los expertos consideran que los desprendimientos se deben al gran peso que el agua ejerce sobre los muros del embalse y a las frecuentes fluctuaciones de su nivel.

Los corrimientos han provocado olas de 50 metros que provocan numerosos daños al romper contra las orillas.

El jefe de la Oficina de Prevención y Control de Desastres Geológicos de la Presa, Huang Xuebin, admite que "los frecuentes desastres ecológicos suponen una amenaza para los residentes en las inmediaciones de la presa". La obra de hormigón y cemento tiene 2.309 metros de longitud y 185 de altura.