La prevalencia de la tuberculosis bovina en varios vertebrados de Doñana supone una seria amenaza para el lince ibérico, según revela un estudio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Este trabajo aconseja sanear la cabaña vacuna y reducir "drásticamente" la población de ungulados (jabalíes, ciervos y gamos, principalmente).

En concreto, la tuberculosis bovina afecta al 28,5% de los ciervos y al 25,8% de los gamos que habitan en el parque nacional. Además, la prevalencia de la enfermedad entre las vacas marismeñas es "muy elevada", pese a que los ejemplares enfermos se sanean cada año. En conjunto, el 39,8% de los ungulados analizados presentaba la enfermedad.

Juan José Negro, investigador de la Estación Biológica de Doñana y director del estudio, explica que una prevalencia de la tuberculosis bovina superior al 1% se considera suficientemente elevada como para exigir el saneamiento de la cabaña.

Respecto a los jabalíes, Negro dice que se comportan como carroñeros, por lo que contribuyen claramente a extender la enfermedad. Por eso cree necesario reducir de forma "drástica" los 1.700 jabalíes que viven en el parque.

En Doñana apenas sobreviven unos 40 linces que, ocasionalmente, se alimentan de animales muertos que disputan a los jabalíes. Ahí se produce el contagio de la tuberculosis. La cepa que se ha identificado ahora es la misma que se detectó en al menos cuatro linces ibéricos muertos en la última década en este espacio protegido.