Los expertos creen que la colocación de tuberías en el océano podría servir para combatir el calentamiento global
28/09/2007 - consumer.es
Ello podría provocar la proliferación de las algas y el descenso del dióxido de carbono

La colocación de tuberías en el océano podría servir para combatir el calentamiento global y hacer que el planeta se pueda curar a sí mismo, según propone en una carta dirigida a la revista "Nature" el autor de la hipótesis Gaia, James Lovelock. La hipótesis Gaia considera a la Tierra y todos sus componentes un gran sistema vivo que se autorregula para mantenerse en unas condiciones de vida ideales.

 

Este sistema de emergencia para conseguir que el planeta se cure a sí mismo es descrito ahora en la revista por James Lovelock, investigador de la Universidad de Oxford en Reino Unido, y Chris Rapley, del Museo de Ciencias de Londres. Para ello plantean que los océanos, que cubren el 70% de la superficie del planeta, podrían conseguir la autorregulación perdida del planeta. Los investigadores proponen situar tuberías verticales de 100 a 200 metros de profundidad y 10 metros de diámetro en el océano con un mecanismo en la parte inferior de las estructuras que permita que los movimientos de las olas bombeen agua hacia la superficie.

 

Esto podría fomentar la proliferación de las algas y a su vez el descenso del dióxido de carbono, según los investigadores. La mayor cantidad de CO2 sumergido aumentaría el dimetilsulfuro (DMS) marino que al salir en forma de gas a la atmósfera daría lugar a la formación de más nubes bajas que a su vez ejercen de parasoles y poseen un efecto refrigerante sobre la superficie al reducir la radiación solar que llega hasta ella, detallaron.

Los riesgos son tan altos que deben probarse que sistemas como el propuesto son viables, según los autores. Lovelock y Rapley justifican este radical método afirmando que "la eliminación de 500 gigatoneladas de dióxido de carbono del aire mediante el esfuerzo humano se encuentra más allá de las capacidades de la tecnología actual. Si no podemos "curar al planeta", tendremos que ayudar al planeta a curarse a sí mismo", concluyeron.