Taiwan quiere planea construir una planta para aprovechar la fuerza de la corriente marina Kuroshio, llamada también corriente Negra, que sería la primera de Asia en su tipo, según declaró Chen Chin-teh, encargado del proyecto.

El Ministerio de Economía ya ha finalizado un estudio sobre la viabilidad de construir una planta para aprovechar la energía de las corrientes marinas: el coste aproximado es de unos 6 millones de dólares y la tecnología necesaria para su construcción se exportará de Estados Unidos o del Reino Unido por su experiencia en la generadores.

Esta fuente de energía renovable se une a un proyecto de gran envergadura para aprovechar la energía eólica y a planes para producir y comercializar biodiésel.