El mercante Don Pedro, de la compañía Iscomar, que se hundió en la madrugada del martes a una milla del puerto de Ibiza con veinte personas a bordo -que fueron rescatadas- ha ocasionado una mancha de fuel de cuatro kilómetros de largo que ya ha afectado parcialmente a la playa de Talamanca. La mancha podría tocar hoy mismo la costa de la isla.

El suceso se produjo cuando el buque, un ro-ro que cubría la línea Ibiza-Valencia, chocó "por un error humano" a los pocos minutos de salir de puerto contra el islote Dado Grande, lo que ocasionó una gran vía de agua, que finalmente lo llevó a hundirse a unos cuarenta metros de profundidad.

Selladas dos de las tres fugas

El buque, de 142 metros de eslora, está cargado con 150 toneladas de fuel y 50 toneladas de gasóleo, según la naviera. A pesar de su hundimiento, el puerto de Ibiza sigue abierto al tráfico, aunque durante la jornada de ayer se registraron retrasos en algunas llegadas. El accidente obligó a activar el Plan Nacional de Emergencias, al que se sumó el Govern balear, y a trasladar a la isla trece expertos de Salvamento Marítimo llegados de A Coruña, Almería, Castellón y Madrid, quienes lograron sellar dos de las tres fugas detectadas en el pecio del buque. Está previsto que este mismo jueves se selle la tercera grieta.

La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, decidió regresar de forma urgente a España desde Uruguay para ponerse al frente de las tareas de rescate. Pequeñas manchas del fuel vertido por el barco llegaron a primera hora de la noche a la playa de Talamanca y al puerto deportivo de Ibiza, donde algunos voluntarios trabajan en la recogida del combustible.

La directora de Salvamento y Seguridad Marítima, Pilar Tejo, afirmó anoche en una conferencia de prensa celebrada en Ibiza que el fuel que desprende el mercante ha generado una mancha de combustible de 2,3 millas de largo -unos cuatro kilómetros- por media milla de ancho, que se dirige hacia el cabo Martinet de la isla. Tejo explicó que la mancha de fuel podría tocar hoy mismo la costa de la isla. "Se han movilizado todos los medios necesarios para atajar el vertido", dijo la directora, quien destacó que el buque de Salvamento Clara Campoamor, uno de los más modernos de Europa para la lucha contra la contaminación, trabaja en la zona desde la siete de la mañana.

Limpieza de las playas

La Delegación del Gobierno en Baleares movilizó al personal de la empresa pública Tragsa por si es necesaria su intervención en las playas de Ibiza, mientras que el Centro Meteorológico hace un seguimiento de las corrientes y los vientos en la zona para valorar las posibles áreas de impacto de contaminación en las costas. Para el caso de que fuera precisa la limpieza de las playas, las consellerias de Interior y de Medio Ambiente del Govern balear han movilizado también a su personal. Tejo señaló que el capitán del buque hundido no está detenido, pero sí que tendrá que dar explicaciones a las autoridades pertinentes sobre lo sucedido.

Los ocupantes del mercante, que se encuentran en buen estado, explicaro que en ese accidente todo fue "muy rápido", por lo que optaron por tirarse por la borda. "Lo peor no ha sido tirarse al mar oscuro y frío de la noche, sino ver como caían las cosas del barco" sobre ellos, confesaron. La naviera Iscomar, por su parte, reconoció que el accidente se debió "a un error humano" y que se ha puesto en contacto con la sociedad PI Britannia para extraer el combustible que guarda el pecio.

La zona en la que se hundió el mercante es peligrosa para la navegación por la presencia de pequeños islotes y agujas bajo el agua. En febrero de 2004, otro buque de carga embarrancó al sur de Ibiza.