Los embalses del Estado en la Cuenca del Duero se encuentran al 43,6 por ciento de su capacidad, según el último informe facilitado por la Confederación Hidrográfica del Duero, 18,4 puntos menos que el pasado año por estas mismas fechas. Un dato que empieza a preocupar a la CHD ya que en provincias como Segovia o Palencia la situación ya es, cuanto menos, preocupante.

Se trata, además, de la cifra más baja de los diez últimos años, periodo en el que la media ha sido del 54 por ciento. Se da, además, la circunstancia de que el año hidrológico comenzó en octubre con bastante volumen de agua almacenada -1.300 hectómetros cúbicos- cuando la media de la década está en 900. Sin embargo, desde ese mes de octubre se ha producido un descenso generalizado de las reservas.

Lo cierto es que el nivel de los embalses es demasiado bajo para la estación actual, sobre todo porque lo habitual es que el otoño sea lo suficientemente lluvioso como para que los embalses empiecen a acumular las reservas que perdieron durante el verano. Sin embargo, este ha sido un otoño seco, sin apenas precipitaciones, por lo que ahora sólo cabe confiar en que el invierno, bien con nieve o con lluvias, permita una remontada y los embalses comiencen a almacenar el agua suficiente como para hacer frente a la próxima campaña de riego y, por supuesto, al abastecimiento de la población.

El Pontón, al 27%

Sin embargo, a día de hoy la situación empieza a ser preocupante en algunas provincias, como es el caso de Palencia y Segovia. En esta última el embalse de Pontón Alto, que abastece a la capital segoviana, está al 27 por ciento de su capacidad, cuando el pasado año estaba al 100%. Es, además, el peor año de los últimos diez, a pesar de que se comenzó con más reservas, 5 hectómetros cúbicos, cuando la media es de 4,2 . Esta situación ha llevado ya a la CHD a poner en marcha tres sistemas de abastecimiento alternativos que permiten garantizar el agua a la capital segoviana. Además, su Ayuntamiento ya ha decretado las primeras restricciones como es la prohibición del riego con agua de la red pública.

Otro de los momentos más preocupantes se vive en Palencia, especialmente en su capital y en el municipio de Carrión de los Condes. Los embalses del sistema del Carrión (Camporredondo y Compuerto), de los que se abastecen, presentan también una situación peor a la del pasado año. A día de hoy se encuentran al 29,5% de su capacidad mientras que el año pasado estaban al 69,4%.

En esta misma provincia, los pantanos del sistema del Pisuerga (Requejada, Cervera y Aguilar), por el contrario, almacenan el 52,4% de su capacidad total frente al 48% que almacenaban el año anterior.

«Hay que controlar»

Es Palencia, por lo tanto, el punto más crítico, como lo reconoce la directora técnico de la CHD, Liana Ardiles, quien asegura que «es una situación que hay que controlar». Y es que Palencia bebe de estos embalses del sistema Carrión, como también lo hace Valladolid, dos ciudades que, no obstante, también se abastecen del sistema Pisuerga, que se encuentra en mejores condiciones. En cualquier caso, de seguir así, también en Palencia habrá que ir pensando en restricciones, al menos en lo que se refiere al riego de parques y jardines.
De hecho, el volumen de agua de embalses de Camporredondo se enmarca en el peor dato histórico que se conoce.

Plan de Sequía

Así las cosas, el propio presidente de la CHD, Antonio Gato, ya ha anunciado que si el invierno y la primavera no dejan las precipitaciones suficientes, tal y como aparece recogido en el Plan de Sequía, será necesario activar planes de emergencia en las problaciones de Palencia y Valladolid de más de 20.000 habitantes. Gato ha ido más allá al reconocer que puede haber problemas con el suministro en la capital palentina si no llueve en el próximo mes.

Donde de momento no hay problemas es en Salamanca, con un embalse de Santa Teresa casi al 60 por ciento de su capacidad, mientras que el de Águeda se encuentra al 72,2 por ciento, la misma cifra que el año anterior. Tampoco en Soria, con Cuerda del Pozo, hay problemas ya que está al 53 por ciento de su capacidad. Estos embalses están soportando bien la falta de precipitaciones por la reserva de agua con la que han comenzado el año hidrológico. De hecho, según aseguró la directora técnica de la CHD, Liana Ardiles, este año se ha hecho un mayor resguardo, lo que ha permitido afrontar mejor el otoño seco. También ha descendido el nivel de los cuatro embalses de la provincia de León. El pantano de Villameca se encuentra al 13,5% de su capacidad y almacena 2,7 hm3 frente a los 14,7 hm3 que almacenaba en 2006. En esta misma provincia, más espectacular resulta la situación del pantano de Barrios de Luna, que está al 25,42% de su capacidad y del embalse de Riaño , que está al 36,85% y almacena 239,9 hm3 frente a los 442,4 del pasado año, mientras que el embalse del Porma está al 42,11% de su capacidad y el año pasado se encontraba al 67 por ciento.